Tres de ellos participan de las empresas, que atraviesan su
peor momento. Ya despidieron a más de 1.800 empleados.
La crisis del grupo de Lázaro Báez lleva prácticamente un
mes. Buscando cumplir con un cronograma de pagos con la UOCRA que incrementa
aún más su situación crediticia, el holding envuelve en su problemático
escenario, a tres de los hijos del empresario K. Jóvenes, directores y dueños
de empresas, no escapan a las deudas para salvar el imperio que nació en mayo
de 2003. Sin los $400 millones que reclaman a Vialidad Nacional en concepto de
certificación de obra y 1.800 despidos efectuados, la principal empresa de
Santa Cruz, favorecida con obra pública durante el kirchnerismo, atraviesa su
peor momento y el empresario K no pudo eximir a sus hijos de la crisis.
Martín Báez, el mayor de los hijos varones, fue dado de alta
en la AFIP a los 20 años y fue en las dos empresas petroleras Epsur y Misahar,
donde Lázaro lo puso por primera vez para integrar un directorio. Las dos
petroleras en las que está al frente, ya emitieron una importante cantidad de
cheques sin fondos: Loscalzos y del Curto, quince en menos de un mes por
$305.592; Kank y Costilla acumula 188 cheques sin fondo por $.8.264.821 y un
crédito de $66. 874.400 en el Banco Nación en calificación 3 "riesgo
medio".
Estas deudas que recaen sobres las empresas que dirige
Martín Báez es producto de la crisis que vive Austral Construcciones, firma
insignia de Lázaro y principal caja para sostener al resto del grupo.
Martín Báez con 35 años está implicado en la causa por
lavado de activos por figurar en los papeles de Teegan Inc. -una sociedad
anónima registrada en Panamá que recibió en el banco Suizo Lombard Odier US$
1,5 millones- desde 2007. Muy joven comenzó a figurar como accionista y
director de diversas empresas: Epsur, Misahar (ambas petroleras), Kank y
Costilla (a la que Nación le entregó $300 millones en obra pública), Loscalzo y
Del Curto (constructoras donde figura su hermano menor, Leandro Báez), Hyu Kar
S.A (dedicada al negocio automotriz), Valle Hermoso SRL (accionista con
Lázaro), Alucom también accionista con su padre.
En Austral tiene firma autorizada al igual que su hermana
Luciana Báez. Además, es presidente del Club Boca Río Gallegos, del cual es
madrina Cristina Kirchner cuyas instalaciones inauguró el entonces presidente
de la AFA Julio Grondona. A este crecimiento empresarial que hoy está
atravesado por los números en rojo, Martín Báez suma nada menos que una Agencia
de Turismo en la que figuraba su madre, Mónica Calismonte.
La mayor de las hijas de Báez fue la primera en sumarse a
las empresas. No había finalizado la escuela secundaria que ya estaba vinculada
a Austral. Junto a Martín, tienen firma autorizada en nombre de la empresa para
transacciones financieras, vinculados ahora a los 563 cheques sin fondo de la
firma por $34.788.820 y a los $162.586.900 de créditos bancarios requeridos por
Austral para sobrellevar la crítica situación que se acrecentó cuando Vialidad
Nacional decidió no pagar $400 millones en certificación de obras.
Luciana cuenta con otros emprendimientos empresariales. Está
Integral Alem y Grupo 4, dedicada a la publicidad y medios. En 2014 sumó
Genika, una firma destinada al alquiler y venta de vehículos, junto a su
hermano menor Leandro.
Leandro, que al igual que su padre y su hermano Martín lleva
de segundo nombre Antonio, constituyó el 17 de junio de 2014 una sociedad junto
a su hermana mayor Luciana, denominada Genika S.A e integra además del
directorio de Austral de otras constructoras: Loscalzos y Delcurto y Kank y
Costilla. El emporio de Báez cuenta con más de 15 empresas en las que
participan sus hijos y el padre se arrepiente de haberlos expuesto tanto, sobre
todo en medio de una profunda crisis que los empuja hacia el concurso de
acreedores.
http://www.clarin.com/
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