La gobernadora dijo que su provincia está quebrada y que
"el modelo no da para más"
Fue un discurso duro y que reveló algo ya sabido: Santa Cruz
es una provincia quebrada. En sus primeras palabras como gobernadora, Alicia
Kirchner, que juró "por Dios, los Santos evangelios y la memoria de Néstor
Kirchner", sostuvo frente al saliente mandatario Daniel Peralta que los
números "están en rojo". Y pidió que Mauricio Macri siga
"enviando fondos como Néstor y Cristina". Por su lado, Máximo
Kirchner aseguró que Alicia "tiene que ir" a la reunión convocada por
el Presidente el sábado.
La deficitaria realidad financiera de la provincia
beneficiada con el envío de fondos durante el kirchnerismo, fue el eje del
discurso de Alicia. Ante una fervorosa militancia y con Cristina Kirchner
sentada en primera fila, abajo del escenario, la flamante gobernadora fue
contundente al decir que "Santa Cruz no la está pasando bien, y no va a
ser fácil salir adelante", pero imprimió optimismo en su discurso:
"lo vamos a hacer juntos".
Gracias a los fondos que el Gobierno nacional garantizó
antes que Cristina deje la Casa Rosada, Alicia podrá pagar el medio aguinaldo
de diciembre y los sueldos hasta marzo. Sin embargo la gobernadora aseveró en
tres oportunidades que "Santa Cruz está quebrada" y explicó que los
ingresos provinciales están "ampliamente superados por la masa
salarial".
Para reforzar su mensaje y con el ex mandatario Peralta
incómodo de a momentos, sentado al lado de Cristina, Kirchner señaló "este
modelo no da para más, Santa Cruz está quebrada en sus finanzas".
Ante el estado crítico en el que señala haber recibido la
provincia, Alicia dirigió un mensaje al nuevo Presidente, "esperamos que
Macri nos siga asistiendo como lo hicieron todos los meses Néstor y Cristina,
hasta que progresivamente salgamos solos". El aplauso se mezcló con
algunos silbidos, en un acto que guardó un llamativo respeto a Peralta y donde
todos dejaron en claro que a Cristina "acá le vamos a seguir diciendo
Presidenta".
Con el desafío de sacar adelante una provincia que está
"fundida" como señalaron varios dirigentes, Alicia se anticipó
"vamos a tener dificultades pero serán progresivamente vencidas".
Santa Cruz necesitará la asistencia de la Casa Rosada donde
después de doce años, ya no están los Kirchner. Este sábado el Presidente
convocó a los gobernadores. Al respecto el diputado Máximo Kirchner dijo que
"obviamente Alicia tiene que ir en el marco de la institucionalidad, tiene
que ir a conversar y escuchar" y corriéndose de las críticas habituales a
Macri dijo "no podemos quedar con preconceptos con el presidente, ya juró,
no vino a Santa Cruz pero esperamos tenga la cabeza abierta a la hora de
ayudar".
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